Las salidas de los niños quedaron en el centro de la polémica cuando Alberto Fernández anunció dos semanas atrás que podrían empezar a circular una hora por día. Desde Córdoba, Rosario, Provincia de Buenos Aires y la Ciudad emitieron un comunicado conjunto que rechazaba la medida.

Desde el distrito capitalino argumentaron que las salidas iban a ser de "imposible control", mientras que el Presidente respondió que la gente no podía estar encerrada de manera indefinida. La tensión entre Nación y Ciudad continuó escalando hasta que finalmente Horacio Rodríguez Larreta y Alberto Fernández se encontraron el jueves en la Quinta de Olivos. El jefe de Gobierno porteño llevó un programa para la reapertura de varios sectores económicos al mismo tiempo que la Ciudad trabajaba en un protocolo para habilitar las salidas de los niños.